Distribuciones GNU/Linux para olvidar los sistemas privativos

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Lo más sencillo es elegir qué distribución se adapta mejor a nuestras necesidadesEl mercado de los ordenadores personales aún está dominado por las grandes compañías, pero existen alternativas libres de calidad que cubren todas las necesidades de un usuario corriente

Fedora

Fedora tiene una de las mayores comunidades del mundo del Software Libre y está lista para deleitarnos con nuevas funcionalidades y tecnologías cada poco tiempo. Entre sus diferentes versiones tenemos el entorno de escritorio Gnome 3 con Gnome Shell, que nos proporcionará una interfaz moderna, rápida y estable. Además de su correspondiente versión 'Live', podremos instalar Fedora fácilmente en pocos 'clicks' siguiendo las instrucciones del instalador. Además de Gnome podemos elegir entre otros entornos de escritorio como KDE (bonito y funcional), LXDE (perfecto para equipos con pocos recursos) y Xfce (ligero pero completo).

 

Mageia

Anteriormente conocida como Mandriva, esta distribución se ha ganado un puesto entre las más populares. Rápida y fiable, tiene especial cuidado en otorgar al usuario un sistema completamente funcional y sencillo desde el primer día. Trae una buena selección de programas desde el inicio para que no haya problemas a la hora de migrar de un sistema a otro. Para que se adapte perfectamente a las necesidades del equipo, Mageia cuenta con varios entornos de escritorio, desde los más 'pesados' y completos como Gnome o KDE a los 'superligeros' como Razor-Qt y E17.

 

Linux Mint

Linux Mint se ha convertido por méritos propios en 'la alternativa' de los usuarios que deciden abandonar los sistemas privativos. Mint siempre tuvo en cuenta que el usuario no tenía porqué saber nada de informática para poder disfrutar de un ordenador, y se las ingenió para simplificar y facilitar el acceso de los usuarios noveles al mundo del Software Libre. Es la distribución perfecta para usar por primera vez y su rendimiento y calidad amenaza con desbancar el trono a otras alternativas libres. Además incluye dos entornos de escritorio derivados de Gnome (MATE y Cinnamon) extremadamente sencillos de usar y con un rendimiento excepcional.

 

Los sistemas operativos GNU/Linux son para todos

Lejos queda ya la fama que arrastraron los sistemas GNU/Linux durante años, que muchos catalogaban como complicados, poco amigables con el usuario y poco compatibles. Ahora cualquiera de estas distribuciones es capaz de satisfacer casi el 100% de las necesidades de un usuario corriente.

Se instalan mediante el típico sistema de 'siguiente, siguiente, finalizar', disponen de una selección de programas con los que funcionar desde el primer día, contienen todos los controladores necesarios para funcionar desde el primer momento sin necesidad de instalaciones posteriores (en la gran mayoría de equipos) y además sus escritorios son sencillos de usar.


Otro punto a favor del uso de estos sistemas es la optimización de recursos y la ecología. Una distribución GNU/Linux funcionará perfectamente en ordenadores 'obsoletos' que pueden acabar en el vertedero cuando podrían funcionar perfectamente durante años con el software adecuado.

El hecho de que sean Software Libre proporciona algunas ventajas adicionales: se pueden descargar generalmente de manera gratuita, su seguridad es mucho mayor que la de los sistemas de código cerrado, ofrecen mayor privacidad al usuario, se puede modificar al gusto del usuario y además podemos hacer copias e instalaciones sin límite.

Un usuario corriente no echará de menos ningún programa privado ya que en su lugar encontraremos alternativas libres como LibreOffice (suite ofimática), Firefox (navegador), Thunderbird (gestor de correo), Gimp (edición de imágenes), Amarok (reproductor de audio), VLC (reproductor de vídeo), entre otros.

El único punto débil que le queda a los sistemas GNU/Linux en el ámbito doméstico son los videojuegos, aunque ya empieza a haber alternativas serias con la llegada de Steam.

Para el usuario que disfruta de internet, el correo electrónico, las redes sociales, las fotos y los documentos, no es necesario pagar cientos de euros por un sistema cerrado. Lo más sencillo es elegir qué distribución se adapta mejor a nuestras necesidades y redescubrir las capacidades de internet y nuestro ordenador.


Fuente: LaInformación